EQUINOCIO de PRIMAVERA en URBASAn UDABERRIA

Me perdí en los bosques húmedos de Urbasa para despedir el Invierno y recibir la PRIMAVERAAA. Que lujo convivir aunque sean sólo 5 días con esas pedazo de Hayas centenarias, los Buitres, los Cárabos , los Caballos… Sin cobertura, que gozada vivir sin mensajes, sin reloj, Dormir, Descansar, Reconectar, Meditar, Pasear, Estar, Creer, Crear, Componer, Cantar, Fotografiar, con el ritmo Natural del cuerpo y del Sol. Esos pedazo de cielos Estrellados estremecedores, esa Lluvia fresca renovadora, ese Frío nocturno, ese Silencio, esa Paz!

En el Equinocio, horas tumbado debajo de la Amoña, la Haya Abuela del lugar, mirando hacia arriba, me envolvía, me sentía dentro de una catedral Natural, con el canto de los pájaros, las caricias del Aire y del Sol, y el olor y el sabor de Hierbas buenas! Que Sanador y que Necesario parar un poco de vez en cuando, bajar del ritmo del día a día, y Recordar la Esencia de lo que Somos y de lo que Es.

Y reaprender a Aceptar que tal y como cada Estrella está en el lugar que está, y no tiene mucho sentido pensar que me gustaría mover a Orión al lado de la Osa Mayor, pues lo mismo sucede con las circunstancias de mi existencia. Acepto, Agradezco y Celebro mi Vida tal y como Es! Como dice esa canción, “que todo está bien, y que bonito vendrá”. Y Agradezco por tantas Almas Lindas Libres que me acompañan en este caminar y me ayudan a Ver.

A veces hubiese preferido no escuchar tantas motosierras, y me daba que pensar. Mi casa se sostiene gracias unos cuantos abetos, mi guitarra, la mesa en la que escribo, son de madera. Pero aún así me cuesta ver esas pilas de Hayas enormes taladas amontonadas, y me duele escuchar cuando alguna gigante caía al suelo, menudo estruendo hacían. Es lo que hay.

Gracias PachaMamaUniverso!!

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